Este bello puerto ha sobrevivido nunca gracias a sus empresarios que lo han explotado hasta la última gota, lo han contaminado, lo han prostituido, lo han escarnecido y lo han saqueado de tal manera que no se han llevado la arena porque ya sería mucho, pese a que saben que si es negocio vender arena.
Pero Acapulco ha sobrevivido a pesar de ellos y cuando pensábamos que no podía haber nada peor, llegó la guerra entre narcos y entre el gobierno y los narcos y con ello una estela de sangre imparable para un gobierno federal incapaz, que actúa como si viviera en un pueblito donde la fuerza ciega del polecía bastara para aplacar a los malosos. Pero esta plaga de violencia es lo peor que le ha podido pasar a Acapulco después de sus rapaces empresarios y corruptos políticos que han legalizado toda la ilegalidad, cambiaron el uso de suelo para construir donde no se debía en fin, todo eso se queda pequeño al lado de las ejecuciones cada vez más horripilantes.
Por eso la iniciativa Habla bien de ACA es como un balde agua fresca, que nos abre la posibilidad de hacer algo por nuestra querida patria chica.
He leído posturas en contra de ella. Se equivocan al oponerse o de plano no quieren a Acapulco. No creo que se trate de negar la realidad, de decir que no hay sangre o ejecuciones, una imagen que se construye con mentiras es tan endeble que no dura mucho y luego vive el rebote, no, yo creo que más bien todos quienes tenemos la manera de hablar con nuestra familia o conocidos que viven en otras ciudades del país o del mundo, les hablemos de la otra realidad. Si hay inseguridad, si hay sangre en las calles, si hay muerte y olor a pólvora, pero de decir eso se encargan las agencias informativas que muchas veces incluso exgeran con tal de que les compren la nota y de vender más periodico, e incluso falsean las cosas como cuando los hechos con en las afueras o en otros municipios cercanos y dicen que fue en Acapulco; a nosotros nos toca decir que tambien hay playas cálidas, ricos mariscos, buenas discotecas, hermosas mujeres, confortables hoteles y que aún se pueden disfrutar.
Si yo puedo pasar un día tranquilo en la playa papagayo comiento arroz con mariscos o en Barra Vieja comiendo pescado a la talla o montando a caballo, o una noche en un bar de la costera bebiendo una exquisita cerveza de barril en tarro, pues hablar de eso. Si yo lo puedo hacer, cualquier turista lo puede hacer. en Acapulco.
Si cada uno de nosotros difunde ese lado de la realidad, estará contribuyendo a que estye puerto no se convierta en un pueblo fantasma y la gente seguira viniendo a pesar de lo malo que tambien ocurre.
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